jueves, marzo 01, 2007

Voluntad

Necesitaría encontrar otra vez una isla
Sentirme arena, sentirme presa del agua, de las tormentas, del Tayta Inty, furioso o dócil, según en día.

Sé que desde hace algún tiempo me persiguen las islas
como si buscaran que flote y formemos archipiélago.
Me hacen gestos amables y guiños constantemente...

aquí
en la ciudad inconmensurable y húmedamente barroca
como si quisieran que piense en todos sus defectos tristes.

Me han abandonado los deja-vus para dar lugar al órden mental corriente
monocromo y ferrocarriloide
(con ferrocarriloide me refiero a la linealidad como opción única, planteada por una vía ferrocarriloidácea en tanto camino ineludible, en principio, por el ferrocarrilero y su ferrocarril de ruedas-pie predeterminadxs por una configuración espacial futurista que establece sus huellas venideras. Aquí la alegoría está aplicada a la linealidad del tiempo y de la percepción de los acontecimientos.)

Las islas me inundaban de deja-vus
y yo lo sentía como un cariño nuevo que me regalaba su tierra fértil aprisionada por caminos de libertad líquida y dulce.

Todos los días
me hacían ver dos veces las cosas que sólo una vez ocurrían
y así violentaba el órden ferrocarriloide que propone la velocidad.

Necesitaría encontrar otra vez una isla,
y sentirme arena

de esa que es orilla.

2 comentarios:

María Virginia Gallo dijo...

Llegué aquí a través del grupo chicos puán y estoy leyendo y me está gustando.
Uno va acostumbrándose la linealidad de la que hablás pero la ciudad también tiene sus desvíos, ciertas chispas.
Debo decir que algo de todo esto me gustó leer en los Versos Libres de José Martí.
Lindo el blog, seguiré chusmeando, saludos y mucho gusto, Virginia

clara elena dijo...

increíble, intermar.
increíble intermar.

me gusta más que todo, o igual que lo que más me gustaba de este blog.

y ya te diré más si te cruzo por ahí.