miércoles, abril 02, 2025

Basta

de poemas tristes

escritos por manos cobardes

Basta

de una literatura del miedo

prisionera de lo cotidiano

rota por el auge del cinismo

Basta

de lloradurías de lamentos

de palabras que olvidan

de huecos hechos a medida

Basta

de la pulsión de muerte

del desencuentro como lengua

de la desidia funcional 

al capitalismo posmoderno

Basta 

de encierro de finales

prematuros de costras

de sal en las heridas

Basta

de la inmersión vacía

de remar en el aire

de la quema del sentido

Basta

de individuos partidos

de fiestas de nadie

sin ojos ni fuerza

Se terminó

la etapa de las palabras

de pólvora mojada, 

ancladas en barro seco 

sustraídas de fuerza

disociadas del poder

de hacer, de recordar

de dar de juntar de empapar 

de construir de empezar de seguir

siempre seguir y seguir y seguir

Adiós

a la cobardía y la desidia

al individualismo y al no future

a la libidinización de la derrota.


Empezó el tiempo

de la guerra 

popular

prolongada

en la vida 

en la calle

en la cama

en la literatura

en el bar

en cada rincón

donde habite 

una porción

de humanidad.

No hay comentarios.: